Buscar este blog

domingo, 20 de junio de 2010

EL MARACUYA

Aunque el nombre del maracuyá proviene de una voz indígena del Brasil que hacía referencia a las características del fruta, esta fruta también es conocida como Fruta de la Pasión, nombre que hace alusión a la pasión o sufrimiento de Cristo, debido que en el arreglo de las estructuras florales los colonizadores vieron los elementos de dicho suceso, y esa estructura se presenta en las diferentes especies que componen en conjunto la familia botánica de las Passifloras. Su nombre científico de passiflora edulis Sims especifica que su fruto es comestible. Actualmente, más de 40 países en el mundo cultivan el maracuyá en forma comercial.
Su jugo es ácido y aromático; se obtiene del arílo, tejido que rodea a la semilla, y es una excelente fuente de vitamina A, niacina, riboflavina y ácido ascórbico. La cáscara y las semillas también son susceptibles de emplearse en la industria, por los componentes que tienen.
Etimología
El nombre de maracuyá del idioma portugués "Maracuja" que significa comida preparada en totuma .En
guaraní se llama "maracuyá" que significa "criadero de moscas”, por la dulzura del néctar que resulta atractivo para el desove de los insectos.
Clasificación Taxonómica
División: Espermatofita
Subdivisión: Angiosperma
Clase: Dicotiledonea
Subclase: Arquiclamidea
Orden: Perietales
Suborden: Flacourtinae
Familia: Plassifloraceae
Género: Passiflora
Serie: Incarnatae
Especie: Edulis
Variedad: Purpúerea y Flavicarpa
Origen del cultivo
Proviene del
Brasil, en el Amazonas, el cual es el mayor productor de esta fruta .Se cultiva en la costa y en la selva del Perú como por ejemplo en las zonas productoras de Piura y Chanchamayo. Esta se puede cultivar en zonas tropicales así como también subtropicales El maracuyá es una planta que pertenece a la familia Pasiflorácea, es vegetativo y flor
Características
Forma: es como una baya redonda u ovoide, siendo la variedad amarilla y la granadilla las de mayor tamaño. El grosor de la piel depende de la variedad. En la granadilla dulce, la cáscara es lisa, dura y acolchada para proteger a la pulpa y su forma es oval, con un extremo acabado en punta. Tamaño y peso: tiene un diámetro de 35 a 80 milímetros y un peso aproximado de 30 gramos. La fruta de la pasión amarilla es más larga que la morada y puede llegar a pesar hasta 100 gramos. Color: su piel varía entre el amarillo o el morado y el naranja, en función de la variedad. La capa interna es blanca y la cavidad contiene gran cantidad de pepitas cubiertas de una carne anaranjada o amarilla y verdosa, muy sabrosa y aromática. La granadilla está repleta de crujientes semillas de color negro-grisáceo.Sabor: tiene un sabor agridulce muy refrescante, exótico, afrutado y con una leve nota a albaricoque. La granadilla dulce tiene una pulpa gelatinosa, viscosa, de sabor más dulce que las otras variedades y muy aromática, con una consistencia similar a una mermelada. La recolección se realiza cuando la fruta de la pasión, amarilla o morada, está madura, se cae al suelo y empieza a arrugarse, pero para poder exportarla fresca, la cosecha debe realizarse antes de que comience dicho proceso. Eliminando la piel y las semillas, se obtiene el jugo puro, que supone aproximadamente un 32% del peso total. Para su envasado, la fruta de la pasión debe ser seleccionada y cortada manualmente. Después se empaqueta en cajas con agujeros para permitir la ventilación.
Propiedades
El Maracuyá contiene varios alcaloides, entre ellos el harmano y el harmol, en dosis normales, una o dos tazas de infusión al día, ayudan a conciliar el sueño y puede tener además efectos antiespasmódicos.
El maracuyá es recomendado también en caso de espasmos bronquiales o intestinales de origen nervioso, así como para los dolores menstruales. Posee también un ligero efecto vasodilatador, reduciendo la tensión arterial, lo cual aligera el trabajo al corazón. Aunque no se recomienda su utilización regular a fin de evitar efectos tóxicos.
El maracuyá contiene polifenoles como el vino tinto, estos tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. También es un efectivo energizante, por esta razón aumenta el metabolismo para la eliminación de las grasas depositadas en los tejidos, motivo por el cual es utilizado como un práctico alimento para adelgazar.

Valor Nutricional

Composición química de la parte comestible del fruto (100 gramos)

Valor Energético 78 calorías
Humedad 85%
Proteínas 0.8 gr
Grasas 0.6 gr
Hidratos de Carbono 2.4 gr
Fibra 0.2 gr
Cenizas Trazas
Calcio 5.0 mg
Fósforo 18.0 mg
Hierro 0.3 mg
Vitamina A Activada 684 mg
Tiamina Trazas
Riboflavina 0.1 mg
Niacina 2.24 mg
Ácido Ascórbico 20 mg

CULTIVO

Existen cuatro métodos de propagación: por semilla, estacas de madera de menos de un año y por acodo, ya sea aéreo o subterráneo. En Costa Rica, el maracuyá se reproduce por semilla.
La semilla debe provenir de plantas con características conocidas y deseables, con buen vigor y alta producción, cuyos frutos tengan un peso superior a 100 g y sean de forma ovalada, cáscara delgada con la pulpa color amarillo intenso, fuerte aroma y de sabor característico. El mucílago de la semilla se elimina a través de una fermentación en agua durante tres o cuatro días. Posteriormente las semillas se lavan, se secan a la sombra y se tratan con un fungicida como carboxin (Vitavax).
Semilla
El semillero se realiza en eras de 1,20 m de ancho y 15 cm de altura, separadas entre sí 40 cm y debe sombrearse. Previo a la siembra, para evitar el ataque de hongos, se debe hacer desinfección del suelo. Con 500 g de semilla, sembrada en surcos distanciados 15 cm y cubierta con una capa delgada de suelo, se obtienen 4.000 plantas, cantidad suficiente para una hectárea. La germinación se inicia aproximadamente tres semanas después de la siembra.
Vivero
Una vez que las plantas han alcanzado una altura de 8 a 10 cm, aproximadamente tres semanas después de la germinación, deben trasplantarse a bolsas de polietileno de 15 x 20 cm. Es recomendable plantar sólo una plantita por bolsa, colocarle un tutor y agregarle 5 g de fertilizante fórmula 10-20-10, que se coloca en un hoyo en el borde de la bolsa.
La sombra debe eliminarse progresivamente hasta el momento del trasplante al sitio definitivo de la siembra. La planta está lista para ser trasplantada el sitio definitivo, cuando tiene 50 cm de altura, aproximadamente a los dos meses de crecimiento en vivero.

Preparación del Suelo
Una vez seleccionado el sitio, si el suelo es arcilloso, un mes del trasplante se debe arar y rastrear, para favorecer el desarrollo de raíces y el drenaje. Si el suelo es suelto, sólo se hacen los hoyos de 30 cm de lado
y 40 cm de fondo. Favorecer el desarrollo de raíces y el drenaje. Si el suelo es suelto, sólo se hacen los hoyos de 30 cm de lado
y 40 cm de fondo. En el caso de terrenos de montaña recién "volteados", es muy importante eliminar los troncos, ya que son el
Hábitat idóneo para las termitas, las cuales atacan también el maracuyá; además, el proceso natural de descomposición de los troncos, puede causar problemas de hongos en la plantación
Clima
El clima es un factor muy importante para el cultivo del maracuyá. Debe escogerse el más adecuado en cada región teniendo en cuenta factores como la altitud, la temperatura, los vientos, la humedad relativa, la duración del día y la precipitación.
El maracuyá tiene un amplio intervalo de adaptación, tanto de pisos térmicos que van de 0 a 1300 m.s.n.m, como de temperaturas que van entre 24° y 28° C.
En regiones con temperaturas promedio por encima de ese rango, el desarrollo vegetativo es acelerado, se restringue la producción de flores, y se reduce el número de botones florales. Las temperaturas bajas que ocurren durante el invierno ocasionan una reducción del número de frutos.
Entre más elevadas sean las temperaturas, más pronto se llegará a la época de cosecha, pero la calidad va a afectarse produciendo frutos de mal sabor, disminución de peso y retardo en la formación de color amarillo.
Radiación Solar
La calidad del fruto está relacionada directamente con la exposición lumínica del área foliar de las plantas. Frutos expuestos al sol disminuyen de peso pero tienen mayor porcentaje de jugo, mayor cantidad de ácido ascórbico, corteza más delgada, y los sólidos solubles también aumentan a mayor radiación solar. Se recomienda cinco horas de luz por día.

Humedad Relativa
Entre más elevada esté la humedad relativa del ambiente, mejor calidad se obtendrá en el maracuyá ya que va a aumentar el peso y el volumen del jugo dándole un buen sabor.
Vientos
El viento a grandes velocidades (más de 50 km/hr) puede causar raspaduras en los frutos. Es uno de los factores en la disminución de peso del producto. En zonas de vientos fuertes, constantes, se dificultan y encarecen el sistema de conducción de las plantas en los soportes o tutores, y causan deshidratación del área foliar de la planta.
Precipitación Fluvial
Para obtener maracuyá de buena calidad, el abastecimiento de agua debe ser adecuado. Su exceso o déficit puede causar daños a los tejidos desmejorando las características del fruto.
El maracuyá es una planta de clima tropical, que exige un suministro de agua en cantidades de 800 a 1500 mm de lluvia anuales bien distribuidos durante los 12 meses del año. En caso contrario requiere riego durante tiempo seco.
Períodos muy lluviosos durante la floración no favorecen la producción, ya que la actividad de los polinizadores es casi nula y los granos de polen se afectan con la humedad. El agua suficiente proporciona al maracuyá un llenado adecuado, el peso aumenta y aumenta el volumen del jugo.
Siembra
La planta de maracuyá se trasplanta al sitio de siembra definitivo cuando alcanza unos 50 cm de altura. La distancia de siembra utilizada es 3 m entre hileras y 5 m entre plantas; al año se elimina una del medio para que queden a una distancia de 10 m.
La plantita de maracuyá debe sembrarse de manera tal que el cuello no quede esfondado, pero lo más conveniente es plantarla en un lomillo de unos 20 cm de altura para favorecer el drenaje y así disminuir la incidencia de pudriciones.
Durante el trasplante es conveniente abonar con fertilizante fórmula completa; la mitad en el fondo del hueco y la otra mitad cuando el hueco se ha llenado con la mitad de la tierra.
Después del trasplante, las plantitas se amarran a la espaldera con un pabilo o una varilla.
Manejo de la Plantación
* Espaldera
Para asegurar el desarrollo óptimo de las plantas de maracuyá, es muy importante la instalación de este tipo de soporte, antes o inmediatamente después del trasplante.
Existen tres sistemas de espalderas o soportes: espaldera vertical, espaldera en T y el emparrado. Al momento de construir la espaldera es conveniente tener en cuenta la dirección del viento y colocarla en la misma dirección. Los postes terminales deben ser reforzados por medio de puntales y alambres fuertes y de acuerdo al largo de la espaldera, deben colocarse postes cada 20 m para reforzar la instalación. La espaldera vertical y la espaldera tipo T son los sistemas más utilizados en Costa Rica.
En la espaldera vertical se utilizan postes de 2,5 a 3 m de largo, que pueden ser vivos como el madero negro, los cuales se colocan a una distancia de 5 m uno del otro y se entierran a una profundidad tal que el poste sobresalga 2 m. El primer alambre se coloca o 1 m de la superficie del suelo y el segundo a 2 m. La planta se amarra con pabilo en el alambre superior, con cuidado de que el amarre quede flojo, ya que el tallo al engrosar puede estrangularse.
Una vez que el tallo se enreda en la espaldera, es muy conveniente eliminar el pabilo.
Para la espaldera tipo T, se construyen armazones de madera en forma de T que se colocan cada 6 m una de la otra. En la regla horizontal (1 m de largo), se colocan tres alambres equidistantes. Este sistema mejora la ventilación, favorece la entrada de la luz, facilita la cosecha de los frutos maduros que aún no han caído, favorece el crecimiento y distribución de las ramas, evita el enmarañamiento de ellas y permite una distribución más eficiente de la solución de plaguicidas atomizados. Tiene la desventaja de que es de mayor costo, implica el uso de madera de buena calidad, no permite el uso de postes vivos y en caso de fallar un poste vertical, se cae toda la espaldera.
Permite una distribución más eficiente de la solución de plaguicidas atomizados. Tiene la desventaja de que es de mayor costo, implica el uso de madera de buena calidad, no permite el uso de postes vivos y en caso de fallar un poste vertical, se cae toda la espaldera. El emparrado es una barbacoa que permite una mejor distribución de bejucos, mejor aireación, ventilación, aprovechamiento de la luz y facilita la cosecha. La atomización debe realizarse con bomba de motor. Es el soporte más caro, por lo cual su utilización no se justifica, ya que el beneficio debido a su uso, no compensa el costo de la inversión.
*Fertilización
Por ser una planta que responde bien a la aplicación de fertilizantes, es recomendable determinar fórmula, dosis y épocas de aplicación para las diferentes zonas productoras, tomando como base el análisis del suelo y el estado de desarrollo de las plantas.
En forma general, se recomienda abonar con 75 g de la fórmula completa 10-30-10 por planta, durante el trasplante, de acuerdo con lo descrito en la siembra. Cuando la planta tiene dos y cuatro meses de trasplantada, aplicar entre 100 y 150 g/planta de la fórmula 15-15-15. Al inicio de la floración aplicar de 200 a 250 g de fórmula 10-20-20 y repetirla cada dos meses mientras dure la producción de frutos. Los elementos menores que requiere en mayor cantidad la planta son: calcio, magnesio, zinc y hierro, los cuales pueden ser suministrados vía foliar.
*Combate de Malezas
En el inicio de la plantación, el combate de malezas deberá hacerse alrededor de la planta para evitar la competencia; una vez que las plantas se desarrollen completamente, solo será necesario entre las hileras. Se pueden utilizar herbicidas como el paraquat o el glifosato a partir del sexto mes después del trasplante, si
Las malezas predominantes son gramíneas. Si durante las primeras etapas de crecimiento hay problemas de malezas, se puede utilizar el haloxifop-butil (Galant, 35 cc pc/16 l) al que se agrega aceite agrícola (Agrol, 2 onzas y penetrante, en la dosis recomendada en la etiqueta).
*Riego
El sistema de riego más utilizado es el riego por gravedad; con este método es necesario regar un sector de 40 a 50 cm alrededor de las plantas. Otro método es el riego por aspersión pero no es recomendable para este cultivo, ya que además de que es de alto costo aumenta la incidencia de antracnosis y daña la floración.
*Poda
La poda se recomienda por varias razones:
_ regula la producción de ramas y la floración, y por ende la producción de frutos;
_ facilita las fumigaciones contra plagas y enfermedades, así como su aprovechamiento.
_ reduce el peso total sobre el sistema de soporte utilizado;
_ se eliminan ramas rastreras que dificultan la cosecha;
_ evita que los frutos maduros queden encerrados entre las ramas en lugar de caer al suelo, lo cual dificulta la cosecha y aumenta los costos.
Esta operación debe iniciarse inmediatamente después de la primera cosecha.
Para evitar bajas en la producción, es conveniente efectuar la poda en hileras alternas y de año de por medio.
Poda de formación
La poda de formación se inicia antes del trasplante en el campo.
Tiene como finalidad dejar únicamente uno o dos ejes por planta, aunque lo más conveniente es dejar dos ejes, a los cuales se les elimina cualquier ramificación hasta la altura de 1 m. Cuando el bejuco guía alcanza 2 m o llega a la parte alta de la espaldera, se corta la parte terminal del bejuco para estimular la brotadura de yemas laterales para que produzcan brotes orientados a ambos lados de la espaldera. Si al año de edad de la plantación, la cantidad de bejucos es excesiva, es conveniente eliminar uno de los dos ejes iníciales.
Poda de limpieza
La poda de limpieza consiste en eliminar ramas viejas o muertas, bejucos que salgan de la espaldera y los que llegan al suelo. Esta operación se debe iniciar después de la primera cosecha.
Poda de renovación
Esta poda se realiza al tercer año de establecida la plantación. Es una poda severa, con la que sólo se deja el tallo principal y ramas primarias con una longitud de 1,5 m.
Cuando se hace esta operación, se existen espalderas dañadas, se aprovecha el momento para repararlas.

ENFERMEDADES
Al igual que las plagas, las enfermedades también influyen en las pérdidas de calidad que se ocasionan durante la etapa de post-cosecha y comercialización del maracuyá. Algunos estudios han demostrado que los agentes patógenos son los responsables de la pudrición de frutos (25%), daños en ramas y hojas (70%) y problemas vasculares en un 35%.
Las enfermedades que más daño le hacen al maracuyá son las siguientes:
Marchitamiento o pudrición seca de los cuellos de la raíz (Fusarium oxysporum passiflorae): Produce decoloración rojiza de la raíz, amarillamiento y marchitamiento general de la planta.
Es una de las enfermedades más temibles en el cultivo de maracuyá. En la actualidad es imposible curar las plantas infectadas, que disminuyen pronto la producción y mueren. La sintomatología consiste en un adormecimiento del follaje, las ramas se tornan flácidas y pierden su turgencia. En el tallo, la raíz se desprende con facilidad y el sistema radicular aparece atrofiado: al hacer un corte longitudinal se encuentra la coloración rojiza característica del hongo. Las medidas preventivas de control incluyen: selección de suelos bien drenados, evitar encharcamientos al regar, aspersiones preventivas cada dos meses con la solución de sulfato de cobre, en mezcla con masilla.
Mancha parda (Alternaria passiflorae): Daños en el follaje y frutos. En las hojas se presentan manchas de color pardo-rojizo y a veces márgenes acuosas. En los frutos se forman áreas necróticas circulares ligeramente hundidas de color pardo-rojizo. Aspectos que desmejoran la presentación del fruto para su comercialización.
Su ocurrencia concuerda con los períodos de lluvia. Se manifiesta en hojas, como una mancha pardorrojiza, de tamaño variable, con bordes aceitosos. En frutos aparecen manchas necróticas que demeritan la calidad de éstos: cuando los tallos son afectados inducen a la brotación de yemas axilares. Ante la presencia de la enfermedad se recomienda efectuar una fumigación muy uniforme que le brinde un excelente cubrimiento al sistema foliar de las plantas, usando fungicidas protectantes.
Roña o costra (Cladosporium herbarum): Presencia de lesiones de color pardo en frutos de diferente tamaño, ocasionan deterioro en la apariencia externa del fruto.
Ataca la fruta, deteriorando su aspecto externo y, por consiguiente, disminuyendo su valor comercial. Los síntomas consisten en lesiones ulcerosas circulares levantadas en forma de verrugas pardas, de tamaños variables y aislados unas de otras. Las aspersiones de sulfato de cobre y cal, en épocas lluviosas coincidentes con la época de formación de frutas, previenen la enfermedad en un alto porcentaje.
Antracnosis (Colletotrichum gleosporoides Penzingi): Los síntomas se observan en hojas, ramas y ocasionalmente en frutos, puede ocasionar defoliación a la planta y si ataca en etapa temprana provoca su caída o lo deforma.
Complejo viral (Tymovirus, Potyvirus, Rhabdovirus): Las enfermedades de etiología viral y asociadas a organismos de tipo micoplasmas en maracuyá son:
 Virus del endurecimiento de los frutos del maracuyá (V:E:F:M) "Passion fruit woodiness virus" Potyvirus.
 Virus del mosaico amarillo del maracuyá (V:M:A:M) (Passion fruit yellow mosaic virus) "Tymovirus"
 Virus del raquitismo del maracuyá (V:R:M) "Passion fruit vein clearing virus" Rhabdovirus.
 Superbrotamiento del maracuyá (O:T:M) Tipo micoplasma.

PLAGAS DE MARACUYA
Insectos dañinos y su combate
*Gusanos del follaje Dione vanillae L. (Lepidoptera: Ninphalidae)
La fase adulta es una mariposa de color rojo ladrillo con manchitas negras. La larva es de color oscuro y cabeza negra, cubierta de cerdas negras ramificadas, estado en el que el insecto causa daños. Las larvas viven en grupos, devoran el follaje, dejando únicamente las nervaduras.
Debido a que este insecto es gregario en su estado larval, recolectar a mano gran cantidad de larvas y crisálidas es relativamente fácil, lo cual podría disminuir notablemente la población.
El combate químico debe emplearse únicamente en caso estrictamente necesario, por cuanto la polinización de este cultivo depende de insectos, como las abejas trigonas.
Los insecticidas deben aplicarse cuando las larvas están pequeñas, las cuales son más fáciles de matar. Los insecticidas que se mencionan a continuación tienen poco a ningún efecto contra insectos benéficos: Bacillus thuringiensis (Dipel PM, 16.000 ui; 200 g/200 l, Bactospeine PL, 8.500 ui; 360 ml/200 l, Thuricide PM, 16.000 ui; 200 g/200 l), endosulfán (Thiodán 35 E, 500 ml/200 l) o triclorfon (Dipterex 95 PS, 250 g/200 l).
Antes de la floración, se pueden utilizar productos no biológicos. Durante la floración y después, únicamente utilizar los biológicos recomendados.
Abeja conga o arragre Trigona spp. (Himenoptera: Apidae)
Son abejas negras o café, peludas y sin aguijón, de 5 a 8 mm de longitud. Cortan o muerden el follaje y las flores produciendo muchas veces su caída por daño directo o por ataque de hongos sobre las heridas causadas.
Contra esta plaga se recomienda la destrucción de los panales ubicados en las cercanías del cultivo pero sólo cuando el ataque es muy fuerte y la plantación está en los estados iníciales de crecimiento, ya que este insecto es un excelente agente polinizador.
El uso de cultivos trampa como el gandul, atrae a la abeja, lo cual disminuye el ataque.
Silva Silba pendula (Diptera: Lonchaeidae)
La mosca adulta es de color azul oscuro y mide 5 mm de longitud. La fase larval destroza los frutos cuando están pequeños.
Como medidas de combate, se recomienda recolectar todas las frutas infestadas en la planta o en el suelo y enterrarlas profundo, liberar la avispita parasita Biosteres longicaudatus.
No se recomienda el uso de insecticidas.
Arañitas rojas Tetranychus spp. (Acarina: Tetranychidae)
Raspan las hojas y chupan la savia; la hoja se torna clorótica, se seca y se cae posteriormente.
Sólo cuando el ataque es severo se aplican acaricidas.

COCECHA
DETERMINACIÓN DE MADUREZ PARA LA COSECHA
La buena calidad comercial se obtiene cuando la cosecha se hace en el estado de madurez comercial apropiado y se llega al mercado de consumo. Un buen medio debe ser ante todo sensible, es decir capaz de poner de manifiesto diferencias pequeñas, práctico, rápido y si es posible que pueda expresar el grado de madurez mediante una cifra que lo haga comparable con las medidas realizadas por otros observadores y en lugares distintos.
La madurez del maracuyá se aprecia visualmente por su color externo. Estudios muestran que el cambio de coloración del fruto se puede emplear como índice
práctico de madurez para la cosecha, pues su variación se correlaciona con un cambio en la composición química interna del fruto.
Los cultivadores de maracuyá han implementado otras formas prácticas para identificar la madurez comercial del fruto, como pérdida de firmeza de la corteza del fruto, pérdida de brillo, desprendimiento fácil al presionar el pedúnculo, o el tiempo transcurrido entre la polinización y fruto en punto de cosecha que puede oscilar entre 8 -10 semanas.
TÉCNICAS, HERRAMIENTAS Y UTENSILIOS DE RECOLECCIÓN
Se recomienda hacer la recolección manualmente, cuando se trata de cosechar maracuyá para el mercado en fresco, la fruta debe recolectarse de la planta utilizando tijeras o doblando el pedúnculo con ayuda de los dedos pulgar e índice a la altura del segundo nudo o punto de abscisión, de esta forma la fruta queda con dos centímetros de pedúnculo, evitando el ataque de hongos y pérdida de peso.
Se recomienda no halar la fruta, pues se puede llegar a producir lesiones causantes de la muerte de ramas de la planta por desgarramiento. Se recomienda mantener las uñas cortas para evitar daños físicos al fruto. En la recolección se debe evitar golpear las frutas, ni tirarlas bruscamente. El maracuyá se debe recoger en las horas frescas del día, preferiblemente en la mañana.
No se deben cosechar frutos húmedos o en tiempo lluvioso, los frutos con daños externos por insectos o enfermedades se recolectan aparte para evitar la contaminación de otros. La frecuencia de la recolección debe ser diaria. El maracuyá debe ser cosechado en recipientes de poca profundidad y de mayor superficie (canastilla plástica), con un recubrimiento interno de papel o con lámina de espuma para evitar daños físicos en el fruto, al igual que proteger de la radiación solar y el movimiento del aire que acelera el deterioro por arrugamiento de la cáscara.
La labor de recolección se debe ejecutar con personal previamente entrenado sobre todo en el reconocimiento de los índices de madurez exigidos para el mercado en fresco. Cuando se trata de cosechar maracuyá para la industria, la fruta se puede recolectar del suelo. En esta forma se garantiza un grado de madurez máximo, que permite alcanzar un nivel adecuado de sólidos solubles totales y buen rendimiento de jugo exigido por la planta procesadora.
La fruta cosechada no debe presentar daños externos por insectos, golpe de sol, ni manchas de ninguna naturaleza; debe ser fresca, no estar biche ni sobre madura. La recolección también debe hacerse diariamente o al menos tres veces por semana, para evitar el deterioro de la fruta por la humedad del suelo que la pudre o por la exposición a los rayos solares, causando problemas de fermentación de la pulpa y deshidratación, permitiendo que el agua del lavado que se utiliza en la planta procesadora, se mezcle con la pulpa, deteriorando finalmente el jugo que presentará residuos del agua clorada en los análisis de laboratorio.
Los empaque se cosecha para la industria pueden ser sacos o tulas de fibra de polipropileno, los cuales tienen más desventajas que ventajas.
VARIEDADES COMERCIALES
Las selecciones de maracuyá entregadas a los agricultores por el ICA en 1966, corresponden a dos formas cultivadas de la especie: Passiflora edulis var. Flavicarpa, con frutos de cáscara amarillas; que se desarrolla muy bien hasta los 1000 m.s.n.m y la Passiflora edulis var. Purpúrea, con frutos de color púrpura que se comporta mejor por encima de los 1000 m.s.n.m. De la primera se seleccionó y recomendó la variedad Hawái, Brasil y Venezuela, variedades de la misma forma pero con características físicas y químicas diferentes, sin embargo, debido a la auto compatibilidad de la planta necesitando polinización cruzada, en Colombia podemos decir que se cultiva comercialmente únicamente el maracuyá amarillo.
La variedad Hawaiana posee las mejores características de tamaño, sabor y rendimiento: tiene cáscara más delgada y, por tanto, mayor capacidad de pulpa. La brasilera y la venezolana poseen más ácido cítrico, pero la segunda es más dulce.
En los últimos años se ha generalizado en Brasil la producción de una variedad de maracuyá denominada "maracuyá doce" o "granadilla perfumada" (Passsiflora alada). El maracuyá dulce, en forma silvestre se encuentra ampliamente distribuido desde el sur del Brasil hasta el Ecuador y Perú. En Brasil ya se está produciendo en forma comercial.
Algunas características de esta variedad son el color anaranjado oscuro de sus frutas con un mesocarpio grueso, el tamaño de los frutos oscila entre 6 y 16 cm de longitud y entre 90 y 300 gr de peso, su forma puede ser globular, ovoide o piriforme. La pulpa (el 16 a 26% de la fruta) tiene sabor suave y ligeramente ácido, con un total de sólidos solubles que varía entre los 15 y 25° Brix.
La "Passiflora Alata" es una planta de mayor producción que la Passiflora edulis For Favicarpa (maracuyá amarilla). Algunas de sus especies son resistentes a fusariosis. Un asola planta puede llegar a ser productora por 10 años, pero la producción requiere una mano de obra más intensiva en materia de poda y mantenimiento.